La infraestructura de ordenadores que controla todo tipo de comunicaciones, transportes y energías sufre un devastador parón. El cerebro que se esconde tras esta trama ha tenido en cuenta hasta el más mínimo detalle de este devastador plan. Con lo que no había contado era con McClane, un poli de la vieja escuela que conoce una o dos cosas acerca de cómo frustrar amenazas terroristas, el hombre adecuado para este tipo de trabajos. Y es que ya se sabe, los tipos duros nunca mueren…
Utilizamos cookies para mejorar tu experiencia de navegación, publicar anuncios y contenidos personalizados y analizar el tráfico en el sitio web. Al hacer clic en "Aceptar" autorizas el uso de estas cookies. Leer más