Isabel está de nuevo embarazada pero antepone sus obligaciones como reina a su condición de mujer. Los intentos por evitar que Portugal apoye a Juana fracasan y desde la corte de Alfonso V llega una noticia demoledora: Juana va a casarse con el rey luso, que está dispuesto a defender con las armas los derechos de su joven esposa al trono de Castilla: la guerra es inevitable. Fernando e Isabel preparan una campaña militar que llega en el peor momento: tendrán que enfrentarse a la poderosa coalición juanista con las arcas de la Corona vacías, escasos apoyos entre la nobleza castellana y un ejército dispar y mal pertrechado. Isabel logrará asentar su legitimidad pero pagará un alto precio por ello. Solo encontrará consuelo y guía en la religión, de la mano de su confesor Hernando de Talavera...
Utilizamos cookies para mejorar tu experiencia de navegación, publicar anuncios y contenidos personalizados y analizar el tráfico en el sitio web. Al hacer clic en "Aceptar" autorizas el uso de estas cookies. Leer más