Hijo de Salvatore Travolta, un vendedor de neumáticos y ex jugador de fútbol americano y Helen Burke, una profesora de teatro de la escuela secundaria. Es el menor de seis hermanos.
Sus padres eran católicos practicantes y creían que el nacimiento de John había sido un verdadero milagro, ya que su madre tenía 44 años cuando lo trajo al mundo. Por ese motivo se convirtió en el centro de los mimos de sus padres y hermanos y fue criado con una gran permisividad.
A los 12 años el pequeño John comenzó a tomar clases de Tap con Fred Kelly, hermano del famoso Gene Kelly. Luego se inscribió en un taller de teatro y pronto apareció en pequeños espectáculos de Music Halls.
A los 16 años, John decidió abandonar la escuela secundaria de Dwight Morrow para dedicarse a la actuación por tiempo completo. Al cumplir los 17 se presentó para el casting de la opera rock "Jesucristo Superstar", producido por Robert Stigwood. Fue rechazado, pero Stigwood anotó en un papel amarillo: "Este chico va a ser una gran estrella".
A los 18 años debutó con la obra "Rain" en un teatro Off Broadway, luego se incorporó en un rol menor a la obra de teatro "Grease". Su debut en Broadway se produjo en 1973 acompañando a las legendarias "Andrew Sisters" en "Over Here", un musical sobre la segunda guerra mundial. Paralelamente participó en varios anuncios publicitarios incluyendo uno para las fuerzas armadas estadounidenses.
En 1974 se mudó definitivamente a Los Angeles y al año siguiente tuvo una pequeña participación en la película de terror "La lluvia del diablo" (The Devil`s Rain). Este film tuvo una importancia capital en la vida de Travolta. Por un lado la actriz Joan Prather lo convenció de abandonar la Iglesia Católica para abrazar la Iglesia Cienciológica de Ron Hubbard y por el otro, su pequeña parte gritando: "Blasfemo, Blasfemo" le alcanzó para que lo llamaran para la serie "Welcome Back, Kotter" para ocupar el rol de Vinnie Barbarino. Travolta inmediatamente se convirtió en el ídolo de las adolescentes norteamericanas de mediados de los setenta. Para completar el cuadro, sacó tres discos: "Can`t let go", "John Travolta" y "Travolta Fever". La revista Bilboard le dio el premio como mejor cantante masculino.
Brian De Palma lo llamó al año siguiente para realizar un papel secundario en la película "Carrie". Luego protagonizó el telefilme "El Chico de la Burbuja de Plástico", en donde empezó a recibir el apoyo de la crítica especializada. También durante la filmación, conoció a su primer gran amor, la actriz Diana Hyland —que en la película actuó como su madre—, 18 años mayor que Travolta. Nueve meses después, Diana murió de cáncer.
El productor Robert Stigwood había guardado aquel papel amarillo, se lo mostró a Travolta y le ofreció un contrato de un millón de dólares para protagonizar tres películas. Entonces ocurrió el milagro. La primera película fue dirigida por John Badham: Travolta interpretó en "Fiebre del sábado noche" a Tony Manero, un muchacho de Brooklyn cuya pasión era ir a bailar a las discotecas. Todo el mundo imitaba la manera de bailar de Travolta. En el solo de baile durante la canción "You should be dancing", el director pensó que Travolta no podría bailar sin parar y le propuso filmar por partes para luego editarlo. Travolta se negó. "No estuve estudiando cinco meses para tener que estar parando a cada rato como un novato. Yo puedo hacerlo". Y por supuesto que pudo. Hasta Fred Astaire dijo que John Travolta era un bailarín impresionante. Los temas de la película —en su mayoría interpretadas por los Bee Gees— le dieron un auge inaudito a la música disco. Durante ese año el Larga Duración recaudó cien millones de dólares de los cuales Travolta se llevó un 1%. Pero no solo de bailes estaba hecho el hombre, por su actuación fue nominado para el Oscar.
Por su contrato con Stigwood, debió filmar "Grease", junto a Olivia Newton-John, recibiendo pésimas críticas, pero recaudando todavía más dinero que "Fiebre del sábado noche". El romance entre las dos estrellas no se hizo esperar, pero duró lo que duró la filmación y Olivia volvió con su marido. La Travoltamanía estaba en pleno apogeo. Por estar en una confitería o en una disco por 15 minutos firmando autógrafos, le pagaban 25.000 dólares. Pero el prefería actuar. Ese mismo año finalizó su contrato con Sitgwood protagonizando junto a Lili Tomlin, "Moment by Moment". La película fue devastada por la crítica y también fue un fracaso comercial.
Al poco tiempo murió su madre de cáncer y se refugió definitivamente en la cienciología. Su próximo éxito ocurrió en el año 1980 junto a Debra Winger con "Urban Cowboy" interpretando a un vaquero que montaba toros mecánicos. Todos los bares de Estados Unidos se poblaron de toros mecánicos.
En 1981 se estrenó "Blow Out" de Brian De Palma, en donde Travolta realizó una de sus mejores actuaciones. La película fue muy bien recibida por la crítica pero la gente no la fue a ver. Comenzaba la declinación del ídolo.
En 1983 Silvester Stallone lo dirigió en la desastrosa segunda parte de "Fiebre del sábado noche", llamada "Staying Alive" y ese mismo año volvió a filmar junto a Olivia Newton-John la película "Tal para cual". Pero ya no eran los mismos.
Se equivocó y rechazó filmar grandes éxitos de los ochenta: "Días de Gloria", "American Gigolo" y "Oficial y Caballero". Las malas lenguas dicen que Richard Gere le debe su carrera a Travolta ya que luego él fue el protagonista de estas películas a mediados de los ochenta, Travolta fue atrapado por la mala fortuna. Si bien no era rechazado directamente en Hollywood, se había convertido en un personaje del ayer, y como personaje del ayer, la prensa comenzaba a difundir rumores acerca de su sexualidad. Como después de la muerte de Diana Hyland no se le conoció un verdadero romance oficial —en realidad mantuvo un romance de 13 años con la actriz Marilou Henner—, se empezó a decir que era gay o bisexual. Exacerbaban sus kilos de más y decían que la Iglesia cienciológica le había lavado el cerebro.
Sin embargo Travolta se quedó tranquilo. Aún en los momentos en que parecía que todos se habían olvidado de él, mantuvo su estilo de vida que contaba entre otras pequeñeces con una casa en Maine frente al mar con veinte dormitorios, una casa de estilo francés en Florida, sus "casitas" en Carmel, Santa Barbara y Hollywood, su colección de automóviles lujosos —un Mercedes Benz, un Jaguar y un Rolls Royce— y sus tres jets privados pilotados por el mismo.
La razón por la cual podía seguir manteniendo su status de vida era por que Travolta seguía ganando dinero por los porcentajes que recibía de los discos de "Fiebre del sábado noche" y "Grease" (que vendieron aproximadamente 19 millones de copias). Por otra parte nunca bajó los brazos: "Siempre que haga las cosas bien y tenga buenas intenciones todo volverá a su lugar".
En 1989, mientras filmaba la película "The Experts", junto a la actriz Kelly Preston, se enamoró de ella. Kelly recién se acababa de separar del actor George Clooney y había tenido un romance con Charlie Sheen, interrumpido cuando éste se fue a pasar la noche con una prostituta. El mismo año que había vuelto el amor, volvió el éxito de taquilla para Travolta con "Mira quien habla", junto a Kristey Alley, recaudando 140 millones de dólares. Pero el suceso no era producto de Travolta. La estrella de la película era un bebé doblado con la voz de Bruce Willis.
El 5 de septiembre de 1991 John y Kelly se casaron por el rito de la Iglesia Cienciológica en París, pero como la boda fue declarada ilegal se volvieron a casar el 12 de septiembre. El 13 de abril del año siguiente nació Jett, el hijo de ambos, que había sido concebido durante un fin de semana en la casa de Demi Moore y Bruce Willis. En 1993 filmó la tercera parte de "Mira quién habla". Pero a pesar de estar trabajando, no recibía críticas elogiosas. Robert Altmann lo había rechazado para su película "The Player" y puso en su lugar a Tim Robbins.
Entonces ocurrió otro milagro. El guionista y director Quentin Tarantino era un admirador confeso de Travolta. Durante doce horas trató de convencer a la ex-superestrella de que debía realizar el papel del heroinómano Vincent Vega en su película "Pulp Fiction". Travolta dudó muchísimo. Los productores dudaron también, pero Tarantino se puso firme y dijo que no haría la película sin Travolta. Harvey Weinstein de Miramax, finalmente dio la luz verde. Travolta se dejó el pelo largo, se puso un arito y filmó por la modestísima suma de 140.000 dólares. Pero no le fue muy mal que digamos. Recibió su segunda nominación al Oscar como mejor actor después de 17 años, comenzaron a lloverle proyectos millonarios y consiguió uno de los regresos más dramáticos desde el Ave Fenix. Travolta le dio todo el crédito de la resurrección a Tarantino.
El director se convirtió en una especie de consultor de Travolta y le comenzó a recomendar que películas hacer y cuales no. Durante 1995 le aconsejó hacer "Como conquistar Hollywood" por la cual cobro 3 millones de dólares y ganó el "Globo de Oro". Luego filmó "White man’s burden", una película en blanco y negro, junto a Harry Belafonte en donde se invierte la realidad y la raza negra domina a la raza blanca. La dirección corrió por cuenta del Japonés—norteamericano Desmond Nakano.
En 1996 recibió 8 millones por "Broken Arrow", prometiendo que esa sería la única película de acción que haría en su vida. Luego vinieron "Phenomenon", en donde interpreta el rol de un hombre al que le cae una extraña luz blanquecina y comienza a realizar eventos extraordinarios. En la película se reconoce inmediatamente la estructura de la Cienciología.
También filmó "Michael", junto a Andy McDowell y William Hurt, en donde esta vez ocupa el rol de un ángel, cobrando 10 millones de dólares. Otros éxitos de esta época son, por ejemplo, las películas "Cara a Cara" y "Primary Colors".
En 2000, Travolta concretó otro de sus sueños y rodó "Campo de batalla: La Tierra", basado en la novela de L. Ron Hubbard, fundador de la Iglesia de Cienciología. Sin embargo, el filme resultó un fracaso.
En el 2001 protagonizó "Operación Swordfish", con Hugh Jackman, Halle Berry y Don Cheadle. La película tuvo una buena acogida entre el público, recaudando cerca de 150 millones de dólares en todo el mundo.
En el 2003 protagonizó "Basic", junto con Connie Nielsen y Samuel L. Jackson. La película fue dirigida por John McTiernan. No fue mal recibida entre el público aunque no fue un gran éxito.
Entre sus últimas películas destacan "The Punisher" (2004) acompañando a Tom Jane; "Brigada 49" (2004), con Joaquin Phoenix; "Be Cool" (2005), con Uma Thurman y Vince Vaughn; "Cerdos salvajes (con un par... de ruedas)" (Wild Hogs) (2007), comedia que tuvo una buena acogida entre el público, recaudando más de 250 millones de dólares en todo el mundo; y el musical "Hairspray", que fue bien recibido por la crítica y funcionó muy bien en taquilla, recaudando más de 200 millones de dólares en todo el mundo...